miércoles, 30 de septiembre de 2020

Contagio

 Apenas puedo distinguir entre lo real de mis últimas horas, o tal vez días, no lo sé muy bien. He despertado fuera de mi sitio, en una estancia alargada, más ancha que un pasillo, pero más estrecha que una sala normal de hospital. Porque estoy en un hospital, es obvio, salvo que esté soñando. Quienes pasan por mi lado son profesionales sanitarios. Y huele a hospital, hace calor de hospital, no hay duda.

Necesito salir de aquí e intento recordar cómo comenzó todo. Yo me sentía muy lejos, me resultaban extrañas las noticias confirmadas por gentes conocidas a través de sus mensajes.