MAS DE CIEN PALABRAS Y UNA MIRADA
La Isla de la ahogada
Vivir en aquella isla era lo más parecido al paraíso. Todo
estaba a mano. El clima era apacible y permitía un vivir confortable. La
dimensión de aquel pedazo de tierra hacía que casi todos los moradores de aquel lugar fueran como una gran familia. Nadie era desconocido
para nadie y la solidaridad y el compañerismo era la tónica dominante entre los
habitantes de aquel paraje. La cercanía al continente y las continuas
comunicaciones por barco hacían que no se notase la situación de insularidad.
Nada se echaba a faltar. Nada invitaba a abandonar aquel lugar…
¿Nada?...