Esto
que algunos y algunas empiezan a llamar “Tercera vía” no acabo de entenderlo
del todo.
Esta
denominación tiene connotaciones históricas de carácter estratégico e
ideológico que situó durante mucho tiempo a la Socialdemocracia europea en el
centro de los comportamientos políticos de gran parte de éste viejo continente.
Y muy para bien.
Pero
me temo que ahora se empieza a utilizar para designar algo de bastante menos
nivel, con otras estrategias y, me parece, otras ideologías.
Si
por “tercera vía” se va entendiendo una simple definición matemática que indica
la posibilidad de que el próximo secretario o secretaria general del PSOE
suponga una tercera opción que supere a las candidaturas de Susana Díaz y la de
Pedro Sánchez, podrá haber cuarta vía y quinta y…las matemáticas nos dicen que
no nos limitemos mucho, que podemos seguir tirando.
Pero
aquí hay un serio problema, según mi punto de vista, en realidad vías, lo que
se dice vías, sólo hay dos. Insisto, desde el punto de vista ideológico y
estratégico. A la sazón: La vía de
quienes no se atreven a conciliar espacio gubernamental con opciones a su
izquierda, y la vía de quienes prefieren ir por ahí en lugar de facilitar más
gobiernos a la derecha (El No es No).
Y
ahora pongamos un nombre que encabece cada una de esas dos opciones. Pero no
nos equivoquemos, sobre lo que los militantes del PSOE han de debatir es sobre esas
dos alternativas, porque una de ellas será la que marque la estrategia y la
definición ideológica de ese partido en el futuro ya inmediato.
Las
opciones no son más que dos, salvo que alguien nos haga pensar en una tercera
que podríamos llamar “ya veremos”. También en PODEMOS tienen este debate
estratégico en cuánto a pactar para hacer gobiernos de izquierda solo después
del sorpasso o no necesariamente. Podría haber también aquí una tercera opción
del “ya veremos” y así en España tendríamos la derecha, la izquierda y los “ya
veremos”. Divertido.
Bromas
aparte, bien me temo que el planteamiento de esos que en el PSOE empiezan a
autodenominarse “tercera vía” son sólo aquellos y aquellas que ven a Susana
Díaz abrasada como para poder ganar un Congreso, pero no aceptan las políticas
defendidas por Pedro Sánchez de negociar alianzas de izquierdas. Total, que tal
vez se estén esforzando por conseguir un Susanísmo sin Susana. (Cuidado, ya se
sabe que a los hombres de paja los carga el diablo.)
Es
obvio que puede haber otros nombres que aspiren a esa secretaría general y a
ser cartel en unas próximas elecciones, pero en éstas circunstancias cualquiera
se ha de presentar con la aceptación del equipo de Pedro Sánchez o del de Susana Díaz. Cualquier intento de equidistancia sonará a falso, no
creíble, y no está ya el PSOE para dar más pasos en falso.
Más
que “tercera Vía” podrían encontrarse con la “Vía muerta”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario